Cada 19 de marzo, la Iglesia celebra la solemnidad de San José, esposo de la Santísima Virgen María. Este año, se celebrará la solemnidad a San José el 20 de marzo para respetar el 4to domingo de Cuaresma. Tuvo el privilegio de ser el padre adoptivo de Jesús, dándole una formación israelita para conocer la Ley y las tradiciones del pueblo. Todo lo que sabemos de San José, lo conocemos por los Evangelios de Mateo, Lucas, y Juan, también lo menciona el profeta Isaías.
José era un hombre fiel a Dios y por tanto acepto ser el esposo de María y padre adoptivo de Jesús. Cuidó de ella mientras esperaban a que su bebé naciera, protegió a Jesús al enterarse del plan de Herodes para matarlo, posterior a ello ayudó a María a criarlo con amor en la ciudad de Nazaret.
Celebración a San José
Así una vez que Jesús se les desapareció, lo encontraron en el Templo, la Virgen nombra a San José con el título de padre, también era llamado así por el propio Jesús. Después de la Virgen María nadie se ha acercado tanto a Dios como San José, en virtud, precisamente de ser esposo de María y padre virginal de Jesús, dando que su santidad no puede compararse con ninguna otra después de María, aunado que es un modelo de la santificación del trabajo, instituyendo la Iglesia el 1 de mayo como la fiesta de San José Obrero. El Papa Pío IX, declaró y constituyó a San José Patrono Universal de la Iglesia, el 8 de diciembre de 1870. Los católicos también lo conocen como Patrono y Abogado de los moribundos, ya que él tuvo una muerte por demás privilegiada, entre los brazos de Jesús y de María. Con esto se le pide su intercesión a la hora de la muerte de un familiar. Esta devoción fue confirmada por el Papa Benedicto XV, el 25 de julio de 1920, mencionando: “Habiendo aprobado esta Sede Apostólica diversos modos de honrar al Santo Patriarca José….celébrese principalmente a San José como patrón de los moribundos, pues a su muerte estuvieron presentes el mismo Jesús y María. Fomenten, pues, las asociaciones piadosas, que fueron fundadas para orar a San José por los moribundos como la de la Buena Muerte, la del Tránsito de San José, etc.”
Santa Teresa de Avila, mencionó: “Tomé por abogado y protector al glorioso San José, y encomiéndeme mucho a él. Vi claro que así de esta necesidad, como de otras mayores, este padre y señor mío me sacó con más bien de lo que yo le sabía pedir. No me acuerdo hasta ahora haberle suplicado cosa que la haya dejado de hacer. Es cosa tan grande las maravillosas mercedes que me ha hecho Dios por medio de este bienaventurado Santo, de los peligros que me ha librado, así de cuerpo como de alma; de este Santo tengo experiencia que socorre en todas las necesidades, y es que quiere el Señor darnos a entender que, así como le fue sujeto en la tierra, que como tenía nombre de Padre, y le podía mandar, así en el cielo hace cuanto le pide. Querría yo persuadir a todos que fuesen devotos de este glorioso santo por la gran experiencia que tengo de los bienes que alcanza de Dios.“
El Papa Pío XI, el 21 de marzo de 1935, aprobó e indulgenció las letanías de San José. Para 1989, el Santo Padre Juan Pablo II, escribió una Exhortación Apostólica llamada “El custodio del Redentor” para entender y profundizar sobre la figura y misión de San José en la vida de Cristo y de la Iglesia.
La Sagrada Familia
San José, un padre que reflejo el amor a Dios y a su familia, siendo un ejemplo de vida para todos. Él nos enseñó a amar y orar para dar gloria a Dios con nuestra vida, a cada día que se nos da, para vivir el evangelio. San José, como jefe de la familia, actúa como Dios le manda, aunque no lo comprenda, pero demostrando su fe y confianza en Él. Así mismo, la Santísima Virgen María desde la Anunciación, se entrega a Dios, demostrándole a su Hijo Jesús su amor maternal. Y finalmente Jesús, demostrando que es el Hijo de Dios, quién se mostró siempre fiel a su Padre, teniendo a María y José como sus padres y educadores.
Hoy Sábado, cerramos el curso sobre los Derechos humanos de los niños, dirigido a padres e hijos que asisten a catecismo en la Iglesia en San Pablo Chimalpa y en la Santa Cruz de Cristo. Ha sido un honor para nosotros poder acompañarlos y brindarles este pequeño taller que se ha preparado con las expertas en el tema: la Lic. Verónica y Miriam.
Sin duda vivimos 3 intensos sábados, donde tanto padres como hijos, aprendieron lecciones, conceptos teóricos y prácticos para aprender y fomentar los principios de educación con ternura. Si bien este curso “Derechos humanos de niños, niñas y adolescentes, límites sanos y educación con ternura“, se han tocado temas fundamentales para el crecimiento familiar, tanto en lo social, como en lo espiritual.
Confiamos en las expertas que nos acompañaron todas estas sesiones con su conocimiento y habilidad para transmitirnos la esencia de cada tema que nos ayudará a crecer como sociedad. El tema de autonomía progresiva, ha sido uno de los pilares en este curso, y es que a la mayoría de los adultos se les ha guiado para crecer y llevar el día a día. Vivimos en una sociedad que nos consume y absorbe de toda energía, vives para trabajar y no trabajas para vivir.
La autonomía progresiva, es nuestra guía para desarrollar la capacidad de tomar decisiones por nosotros mismos; y se va desarrollando desde nuestra infancia. ¿Y cómo sabremos si nuestras decisiones son correctas? Aunado a esta independencia para tomar decisiones, se deben regular bajo un contexto que reconozca la autoridad y poder legítimo para no dañar a nadie o romper con las reglas de convivencia.
Como sociedad libre, debemos fomentar líderes, quienes tengan la capacidad de decidir de forma constructiva, escuchando a los demás, tomando decisiones con responsabilidad para estar “dos pasos adelante” y garantizar la comunicación efectiva entre todos. Estos nos llevará a un marco de autoridad, donde mediante el poder y el liderazgo, se evita la desconfianza y temores.
Reconozcamos nuestras debilidades y crezcamos juntos como individuos, familia y como sociedad. Aprendamos a tomar conciencia sobre nuestros actos e impulsos para no reflejar conductas incoherentes en nuestros pequeños, seamos capaces de fomentar el diálogo, de expresar sanamente nuestras emociones y de solucionar conflictos desde su naturaleza (sin atacar a los involucrados, sólo atacando el problema en sí).
Tenemos mucho por aprender y sobre todo, tenemos mucho por disfrutar en familia. Eduquemos a los niños con ternura, marcando límites y preparándolos para sus deberes y responsabilidades. Si se perdieron la sesión pasada, les dejamos aquí la nota de la semana pasada.
Les agradecemos mucho a Verónica y Miriam por su participación en este curso, por su entrega y compromiso; así como a todas las catequistas y compañeros que nos han brindado su apoyo. Esperamos de todo corazón que este curso les sea de gran utilidad y se lleven grandes enseñanzas junto con sus hijos.
Agradecemos a todos los que asistieron a esta plática que está enfocada a las quinceañeras de Cuajimalpa. Hoy nos llevamos la alegría de haber compartido con todos ustedes nuestras experiencias y material que hemos preparado para que se preparen las quinceañeras en su celebración.
Como en cada plática, contamos con la participación de nuestros compañeros del Grupo Pastoral de Adolescentes, a quienes agradecemos por su labor en esta sesión, gracias a Marisol, Xochiquetzal, Karina, Montserrat, Diana, Valentín, Oswaldo, Javier y por supuesto, a nuestros coordinadores Rosario y Enrique.
Gracias a la retroalimentación de sesiones anteriores, hemos construido y mejorado nuestras dinámicas para compartirles todo el conocimiento que nuestras quinceañeras de Cuajimalpa deben saber y entender para estar preparadas antes, durante y después de su celebración de XV años. Y no sólo ellas, la plática se abre para interactuar con los papás, padrinos y hasta sus chambelanes.
Es muy agradable para nosotros, ver cómo los papás interactúan con sus hijos y los acercan con empatía y respeto a este camino de Dios y María. Fue increíble escuchar los consejos y palabras de aliento que se dedicaron a las quinceañeras y sobre todo vivir en un ambiente de amor familiar entre los participantes con nuestras dinámicas.
La Iglesia es y siempre será un espacio para todos ustedes, donde sin duda encontrarán alivio, paz y protección. Su espíritu se fortalecerá y unirá más lazos familiares cada que lo permitan, tal como en esta sesión lo hemos vivido. Esperamos que cada una de las palabras y vivencias de nuestros compañeros sean de gran ayuda para todos ustedes y que encuentren en su corazón la fe para recibir a Dios.
Sabemos que nuestras próximas festejadas, vivirán la mejor fiesta de XV años en compañía de sus familiares, padrinos, amigos y chambelanes. Nunca se suelten de la mano de la Virgen María, ella las guiará en un camino de pureza, así como Dios las acompañará en todo momento.
Disfruten mucho de todo lo vivido el día de hoy y recuerden que nuestros padres siempre estarán ahí para animarnos, asesorarnos y darnos su amor. Invitamos a todos los participantes a reforzar lo aprendido, día con día, ayudemos a nuestras quinceañeras para que crezcan fuertes de mente y espíritu.
En la segunda sesión de este Sábado, cubrimos un tema super importante: educar con ternura y esto es parte fundamental de lo que hoy nos platicó Verónica y su compañera Miriam. Si se perdieron la primera sesión de este curso llamado “Derechos humanos de niños, niñas y adolescentes, límites sanos y educación con ternura“, les dejamos aquí un breve resumen.
En esta ocasión, seguimos trabajando con niños de catecismo que viven y asisten a la Iglesia en San Pablo Chimalpa y con la Santa Cruz de Cristo. Como se vio en la primera sesión, es importante participar con nuestros niños, están en una etapa de descubrimiento y de fácil influencia; y por ello hemos tomado esta iniciativa de buscar la participación de los expertos en materia de Derechos humanos en niños o adolescentes.
Tal como se vive en cada una de las sesiones de este curso, hemos aprendido la importancia de trascender por un bien espiritual. Seguramente se preguntarán: ¿Qué es eso? Pues es algo realmente sencillo, es darle un sentido de vida o pertenencia a nuestro espíritu, es encontrar el camino que queremos seguir y actuar con congruencia; así podremos pasar a otro ambiente con mayor entendimiento sobre el mundo y lo que nos rodea.
Y bueno, ¿cómo podemos trascender espiritualmente con nuestros hijos? Aunque resulta sencillo definirlo, la práctica nos lleva años de experiencia. Lo primordial es marcar límites sanos entre la relación padres-hijos, reconocernos como personas y entender que no siempre debemos esconder nuestra tristeza, enojo o frustración; también es parte del cómo educamos a nuestros hijos. Recordemos que ellos nos observan todo el tiempo y tienden a copiar conductas que ven a diario en casa, por ello es importante establecer una comunicación abierta con ellos, donde digamos lo que está mal y cómo lo podemos solucionar, así estaremos aplicando el concepto de educar con ternura.
Como bien nos han enseñado en este curso, es completamente natural que el ser humano reaccione de 3 formas antes alguna situación de estrés, alerta o enojo; ya sea que:
Nos paralicemos. Es cuando no realizamos ninguna acción, ni busquemos una conversación sobre el tema detonante.
Nos enojamos. Esta es una de las reacciones más comunes, donde acudimos a la agresión física, verbal o emocional.
Huimos. Esto es cuando no sabemos qué hacer y sólo queremos evadir el momento.
Por ello los papás deben tener enseñar la importancia de los valores como el respeto y honestidad, para lograr un equilibrio en la vida de cada uno de estos niños y ayudarles a crecer por su bienestar emocional. Cada uno de nosotros podemos contribuir a la comunidad desde casa, ayudando a crecer la sociedad sin maltrato, con dignidad, cumpliendo con nuestros deberes y responsabilidades.
Y es que el maltrato, sólo es una salida agresiva cuando se tiene una incapacidad de comprender y comunicarse con los demás. Debemos educar con ternura, sin violencia física o psicológica, haciendo que participen los niños en pequeñas tareas del hogar (sin explotarlos), para que poco a poco formen un criterio de responsabilidad y sean congruentes en su autonomía progresiva.
Agradecemos mucho a Verónica y Miriam por sus enseñanzas en estas sesiones, es muy importante tener estas dinámicas con los papás de las comunidades para ayudar en el crecimiento de sus hijos desde una perspectiva espiritual y sin duda, las dinámicas que se realizan con los niños ayudarán a complementar este desarrollo afectivo con los papás.