Este 22 de febrero celebramos el Miércoles de Ceniza 2023, marcando con ello nuestra preparación a la conversión y de algún modo prepararnos verdaderamente para vivir los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo, en esta Semana Santa.
Es una celebración donde se bendice e impone en la frente de los fieles que acuden, la ceniza hecha de las palmas benditas del Domingo de Ramos anterior, las cuales son rociadas con agua bendita, sólo por el sacerdote o diácono y luego aromatizadas con incienso.
La ceniza es un signo de arrepentimiento, de la confesión de nuestros pecados, de penitencia, tiempo de reflexión de nuestra vida; ante todo representa reconciliarnos con Dios y convertirnos internamente, para seguir a Dios.
Comenzando con nuestro arrepentimiento el cual debe ser sincero, reconociendo las faltas que hemos cometido, después ante el sacerdote hacer la confesión de nuestros pecados, llevar a cabo la penitencia que el sacerdote en el Sacramento de la Reconciliación nos imponga, para terminar con nuestra Conversión, hacia el seguimiento a Jesús.
Recordemos que es tiempo de oración, de ayuno, de renunciar voluntariamente a situaciones que nos producen satisfacción con la intención de agradar a Dios.

Antiguamente, las personas se colocaban ceniza en la cabeza y se presentaban vestidos de blanco para recibir el Sacramento de la Reconciliación en el Jueves Santo y a partir del siglo XI, la Iglesia en Roma impone las cenizas al inicio de este tiempo litúrgico, teniendo un sentido simbólico de muerte, de humildad y penitencia.
La ceniza se impone en la Misa al término de la homilía, en la frente, haciendo la señal de la cruz con ellas mientras se dicen las palabras bíblicas: “Acuérdate que eres polvo y en polvo te convertirás”, o también “Conviértete y cree en el Evangelio”. Con ello debemos retirarnos a nuestro lugar en silencio para reflexionar. Existen ocasiones en que no hay celebración de misa, pero se puede imponer previo a una liturgia de la palabra.
No es obligatoria la imposición de ceniza y la puede recibir cualquier persona de cualquier religión, pero sí es obligatorio el ayuno y la abstinencia, para mayores de 18 años y menores de 60, fuera de ese rango de edades, es opcional. La abstinencia de comer carne roja es obligatoria desde los 14 años.
Desde el Miércoles de Ceniza en adelante, todos los viernes del tiempo de Cuaresma también son de abstinencia obligatoria. Los invitamos este Miércoles 22 a tomar su ceniza en la Parroquia de San Pedro Apóstol Cuajimalpa.